Regina García López nace en Valtravieso (Valdés) en 1898 y muere en Madrid en 1942. El trágico accidente ocurrido cuando la protagonista apenas había superado los nueve años, y que le arrancó los brazos, fue decisivo para que su vida alcanzara una gran trascendencia y renombre, ocultos durante muchos años y que el autor ahora nos ofrece como novedoso hallazgo, fruto de una exhaustiva labor de investigación, enriquecida con datos obtenidos a través de numerosas entrevistas a testigos de tan singular historia.Viéndose mutilada, Regina decidió rebelarse ante la tremenda desgracia que la había desprovisto de sus brazos. Para ello, puso en marcha el contenido máximo de orgullo y voluntad que atesoraba su flagelado cuerpo. Valiéndose de los pies, asombró a medio mundo con sus exhibiciones artísticas. Paralelamente a sus triunfos, fue tomando parte activa a favor de los más desfavorecidos, oponiéndose frontalmente a las injusticias que sufrían tanto niños como mujeres.A punto de retirarse, la guerra civil la sorprendió en medio de dos fuegos. Mientras las bombas llovían sobre un Madrid leal al gobierno constitucional, adonde había llegado para una actuación benéfica, Regina aprovechaba sus contactos intercediendo por la libertad de algunos presos. Su atrevimiento fue castigado con la cárcel, siendo liberada al producirse la caída de Madrid. Su libertad duraría poco: al conocer sus antecedentes reivindicativos, la policía franquista la lleva de nuevo a prisión, de la que solamente salió para ingresar en un hospital, gravemente enferma y en calidad de detenida. Días después de su muerte, llegaría su absolución.