En un almacén del puerto de Leith, un distrito de Edimburgo, ha aparecido el cadáver desnudo de un diputado tory llamado Ritchie Gulliver. El cuerpo presenta una particularidad: lo han castrado. Entra en escena el inspector Ray Lennox, un viejo conocido para los lectores de Welsh Un trhiller irreverente con el sello inconfundible del autor: violencia, sexo y humor negro a ritmo de punk.