LLUÍS BONET MOJICAPRÓLOGO DE GUILLERMO CABRERA INFANTE
Supo inventarse un personaje, el de Cary Grant, y eso le bastó para convertirse en la
estrella más emblemática de un Hollywood que continúa buscándole sustituto. Fue realmente
único. Sin él no existirían algunos de los títulos de oro de la mejor comedia americana de
todos los tiempos. De "La fiera de mi niña" a "Me siento rejuvenecer", pasando por
"Luna Nueva" o "Historias de Filadelfia".