Isabel de la Fuente nació en Llanes en 1884, casó con un indiano y cruzó el mar.
Durante su estancia en México hace ya más de un siglo, fue escribiendo en dos pequeños cuadernillos un recetario de cocina.
Con trazo a veces fuerte y a veces desvaído, como el pulso de una vida, la tía Isabel fue plasmando entre renglones una mezcla delicada de saberes tradicionales adquiridos en su hogar de Asturias, con los nuevos aromas y sabores del otro lado del océano.