Un libro de poemas es siempre una construcción incompleta. En ocasiones sobran fragmentos, en ocasiones faltan. El poeta solo las articula. Al tiempo, un libro de poemas puede ser un único poema inquebrantable que asumimos.
'Rocas' son los materiales para una construcción poética. La del autor, por ejemplo, un ensamblaje arquitectónico que se puede habitar y así aceptar viejos fantasmas, mundos en los que convivimos y sueños. Pero también está la del lector, no importa si rebelde a la contra o cómplice a favor. Un lector activo que, a partir de los fragmentos de 'Rocas', destruye y reconstruye para que cobren vida monstruos del pasado, rutas vigentes o futuras esperanzas.