Descubre cómo las cosas buenas llevan su tiempo.
A lo largo de un minuto, de un día o de todo un siglo, los corazones laten, los árboles dan fruto y las personas vivimos vidas enteras. Déjate ,aravillar por la magia de los ciclos de la naturaleza y descubrirás que, para las cosas buenas de la vida, siempre vale la pena tener un poco de paciencia.