Ni Sherlock Holmes, ni Hercule Poirot ni ningún otro de los grandes detectives de la literatura y del cine habrían existido sin Auguste Dupin, el personaje con el que el genial y atormentado Edgar Allan Poe inauguró todo un género: la novela policíaca. Aficionado a los enigmas y dotado de una asombrosa capacidad deductiva, Dupin resuelve casi sin moverse de casa los más intrincados misterios, los crímenes que desconciertan a la policía y mantienen en vilo a todos los ciudadanos de París. Este volumen reúne los tres relatos en los que Poe dio vida al primer investigador privado de la historia: Los asesinatos de la Rue Morgue, El misterio de Marie Rogêt y La carta robada.