Contemporáneo de Issa Kobayashi en Japón o de Goethe y Goya en Occidente, Ryookan vivió entre 1758 y 1831. Tuvo una formación budista como monje zen, aunque pronto decidió ernanciparse y vivir de manera independiente, como ermitaño mendicante. Pasó la mayor parte de su vida en pequeñas cabañas o eremitorios, cercanos a templos, no como monje de vida comunitaria, sino como hombre libre, imbuido del espíritu zen, a quien gustaba disfrutar de la naturaleza y de la compañía humana, vivir a su aire, sin ataduras, y escribir con hermosa caligrafía versos de diversos estilos y temáticas, en chino y en japonés. Entre ellos están estos 99 jaikus, todos los que de él se conservan, traducidos por primera vez a nuestro idioma por Teresa Herrero y Jesús Munárriz, que ya habían colaborado anteriormente en Haiga. Haikus ilustrados de Yukki Yaura.