Con apenas veintitrés años, Carmen Laforet ganó el Premio Nadal en su primera convocatoria con la novela Nada. Fue la gran revelación de la literatura española de posguerra, y se convirtió en una autora de culto para varias generaciones.
En La llamada, Mercedes abandona el hogar conyugal en busca de sus sueños, en un viaje que la llevará de vuelta a sí misma. Un noviazgo subvierte las reglas de la novela rosa con el personaje de Alicia, la secretaria sumisa, enamorada de su jefe... hasta cierto punto. En El último verano y El piano la generosidad de doña Pepita o la alegría juvenil de Rosa vienen a mostrarnos a otra luz ese mismo paisaje de la posguerra española, crudo y desgarrado, donde la miseria afectaba a todos sin excepción.
Cuatro caracteres femeninos y cuatro supuestos narrativos muy distintos, en los que late sin embargo un mismo trasfondo de vibración humana y de rebeldía vital que transmite al lector un poderoso sentimiento de realidad.
Escritos con un estilo magistral y sugerente, la sensibilidad de Carmen Laforet alcanza en estos relatos una depuración insuperable. Por ello y por sus temas, la crítica ha visto en ellos un anticipo del que sería su siguiente libro, La mujer nueva.