La vida nos presenta en ocasiones obstáculos, o incluso nos golpea con dramas y tragedias. Pero también nos agasaja con la abundancia de bonitos momentos, cotidianas alegrías y maravillosas relaciones. Todo ello es parte de la fortuna de vivir. Y al igual que no existe día sin noche, u océano sin agua, tampoco hay bien sin mal, ni vida sin muerte. Cada fracción forma parte de un todo.
«Muévete, que tu naturaleza no se convierta en piedra», es la premisa bajo la cual se fragua la aventura de recorrer un nuevo camino. Es el modo de enfrentarse al miedo de lo desconocido, de despertar las emociones dormidas y de encontrar un destino propio.
Esta es la divertida e íntima historia de alguien corriente viviendo un momento especial. Alguien dispuesto a salir de su casa con tan solo una mochila y descubrir qué hay unos pasos más allá. Ese alguien que no conoces, o que perfectamente podrías ser tú.