Frank y su hermano mayor, Burki, viven en el Berlín de la postguerra. La ciudad está dividida en sectores y ellos residen en la zona rusa. Su madre vuelve a casarse, y el padrastro romperá la armonía familiar, pero la amistad entre los hermanos permanece incólume. El fútbol será una afición compartida y el desencadenante de una tragedia.