En este libro, Ralf Dahrendorf analiza los peligros que amenazan el orden liberal en los Estados democráticos y los obstáculos para el establecimiento de ese orden en aquellos países que apenas lo conocen o que nunca lo han conocldo. En las democracias occidentales, la libertad está amenazada por una globalización sustraída a la formación de la voluntad democrática y por el nuevo regionalismo antiliberal, pero también por el autoritarismo político y su otra cara, la apatía de los ciudadanos. En el mundo poscomunista, quienes vuelven a la democracia pueden empezar a volver a dudar de ella, pues
el bienestar, al que consideran como un efecto inmediato de un sistema democrático, siempre tarda en Ilegar. En los países del «Tercer Mundo», finalmente, los propios procesos de democratización, con sus grandes promesas y sus pequeños logros, pueden desencadenar peligrosos movimientos antidemocráticos y desembocar en el fundamentalismo religioso y el terrorismo.