Los cuentos son un curso completo de formación para la vida. Ayudan al niño a crecer, son un juego, una terapia, un alimento para la inteligencia emocional. Pero ¿cuáles contar y cómo?
«Érase una vez...» Y hoy también lo es. Así como los cuentas perduran con el paso del tiempo, el placer del niño cuando los escucha también pervive. Los cuéntos presentan siempre unos problemas (pruebas que hay que realizar, obstáculos que hay que superar) en los que el niño se reconoce, y unas soluciones que recibe con alegría. Problemas y soluciones que le «hablan» en el lenguaje más sencillo y más comprensible para él, el de la fantasía. Donde los Malos son verdaderamente malos y los Buenos verdaderamente bue nos..., y sobre todo salen siempre victoriosos. Con ejemplos concretos extraídos del patrimonio de los clásicos este ágil manual explica a los padres por qué los cuentos, incluso los más «antiguos» son, todavía hoy, tremendamente actuales; indica qué cuentos se deben escoger y cuáles es mejor evitar; sugiere cómo crear un cuento para cada niño y cómo lograr que cree el suyo propio (utilizando también las nuevas ilustraciones a color de los personajes, incluidas al final del libro). Dos de los capítulos se dedican a los maestros y al uso de los cuentos como herramienta didáctica.