Esta es la historia de Amaia, Mery, Coral y Júlia. Pero, amiga, también podría ser la tuya. El casero te sube el alquiler. El trabajo te provoca ansiedad y desequilibrios hormonales. Te sientes culpable por tus gastos hormiga y por todas las veces que hablas de más. Deberías apuntarte al gimnasio, pero eres más vaga que el suelo. A pesar de que se supone que lo has hecho todo bien, la vida adulta no es lo que te prometieron. Nadie te quiere y compartes piso con tres chicas que, sinceramente, están peor que tú.
En resumen, te sientes perdida, estafada y más precaria que las ratas, pero no pasa nada: al menos tienes a tus amigas. Ellas se convertirán en tu refugio, te salvarán incluso de los momentos más ridículos. Y no te preocupes, algún día se te calmará el tic en el ojo.
Una comedia para fans de Girls y Sexo en Nueva York que sueñan con esas experiencias cosmopolitas y pisos enormes pero que saben que la vida no es, precisamente, una serie de televisión.