Es junio de 2016, y el mundo de Carmen Romero se desmorona. Miguel -su hermano, de solo veintiséis años, militar de profesión- se quita la vida al saltar por la ventana de la casa familiar mientras ven juntos El Padrino. Todo ocurre muy rápido; tanto que las cosas que hasta entonces tenían sentido dejan de tenerlo. Carmen cree vivir en una ficción: policía, vecinos, médicos, ambulancias y hasta su madre y su hermana participan del rodaje de una película en la que nadie dice: «¡Corten!».
Así comienza el relato de la humorista Carmen Romero, quien, tras el suicidio de su hermano, entra en estado de shock. Para reconectar consigo misma, Carmen comienza a tantear las dimensiones de la tristeza hasta que, de forma inesperada, irrumpe el humor. Solo entonces comprende que la única forma de agarrarse a la vida pasa por afrontar la muerte desde un lugar alejado del tabú, el silencio y el miedo.